importancia de la dieta en la infancia
En los niños obesos se producen interacciones complejas entre genética y otros factores(medio ambiente, sociales y factores de comportamiento) que afectarán a la ingesta y al gasto de energía.
La obesidad es un problema de salud en todo el mundo. A partir de 2003, el 30% de los adultos y el 15% de los niños (2-19 años) a nivel mundial fueron clasificados como obesos.
La obesidad infantil no sólo es epidemia en los países desarrollados, como los países de Europa occidental, Australia y EE.UU., sino también en los países en desarrollo. En los EE.UU., un tercio de los niños y adolescentes (unos 23 millones) tienen sobrepeso o son obesos. Incluso en China, la tasa de obesidad en los niños se está incrementando de manera significativa durante la última década.
En un 80% de los casos, el niño obeso se convertirá en un adulto obeso.
La obesidad a cualquier edad conlleva numerosos problemas de salud: Hipertensión arterial, diabetes, trastornos respiratorios, cardiopatía, cáncer, etc
Muchas enfermedades relacionadas con la obesidad antes condsideradas solo en los adultos se ven ahora en niños con una frecuencia cada vez mayor. Por ejemplo, la diabetes tipo 2, también llamada diabetes del adulto, ahora aparece en niños de ocho años. Estos niños tienen que hacer frente a dicha enfermedad crónica durante un período muy prolongado de tiempo.
Pero además la obesidad es un problema económico, todos los obesos originan un enorme gasto en cuidados de salud.
Aunque la genética es un factor importante para la obesidad infantil (la probabilidad de que un niño con uno de los padres obesos se convierta en un adulto obeso es tres veces mayor que en los que no tienen padres obesos) no es el único factor. En los niños obesos interactúan genética, factores medioambientales, sociales y de comportamiento, que afectarán a la ingesta y al gasto de energía.
El factor genético es difícilmente modificable para prevenir la obesidad, por eso lo más eficaz en este sentido es corregir los habitos tanto de dieta como de actividad física. Incentivar el ejercicio físico al mismo tiempo que realizar una dieta a base de alimentos saludables y en cantidad moderada.
Solo así podemos prevenir que esta epidemia de obesidad siga en aumento.
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