Obesidad y deporte

25 abril 2014

Compartir

LA ACTIVIDAD FISICA COMO FUENTE DE SALUD

Sedentarismo

Obesidad y Ejercicio

Como ya hemos comentado en otras ocasiones, los pilares de una vida sana se sustentan básicamente en dos aspectos: dieta saludable y ejercicio físico regular.

Leemos en el País un artículo (http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/03/24/actualidad/1395693525_587463.html) que hace alusión al ejercicio físico y que nos alerta de que en nuestro país estamos muy por detrás del resto de Europa en cuanto a la práctica del mismo. Como se comenta en el articulo,  hay muchas facetas que distinguen a suecos, finlandeses o daneses de los españoles. Por ejemplo, el ejercicio que practican. O, mejor, el que no practican. En Suecia, la tasa de personas que no hace nunca deporte es minoritaria: solo alcanza el 9%. En Finlandia, es del 15%, y en Dinamarca, del 14%. En España la cifra es de 44%: casi uno de cada dos ciudadanos no hace ningún tipo de deporte.

Los últimos datos del Eurobarómetro sobre actividad física elaborado por la Comisión Europea dibujan un continente dividido: mientras los países del norte son físicamente más activos, a los del sur y el este les cuesta más estirar los músculos.

Los datos de España no son buenos, pero tampoco son los peores. El 60% de los rumanos o de los italianos nunca hace ejercicio. Tampoco el 64% de polacos, el 75% de los malteses o el 78% de los búlgaros. La media europea muestra que el 42% no se calza nunca las zapatillas de deporte (37% de hombres, 47% de mujeres).

Los médicos nos alertan sobre los efectos nocivos de la inactividad física:  es el cuarto factor de riesgo de la mortalidad mundial (se atribuyen a esta causa el 6% de las muertes registradas en el mundo), según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es responsable de entre un 21% y 25% de los cánceres de mama y colon, el 27% de casos de diabetes y se vincula al 30% de la cardiopatía isquémica.

Frente a los peligros de la inactividad física, los cardiólogos consideran el ejercicio como un aliado clave para combatir algunos de los principales factores de riesgo de las patologías coronarias y vasculares.

Como también se apunta en el artículo, el deporte aumenta los niveles del colesterol HDL (el bueno) y es un aliado contra la hipertensión. Remite a un trabajo del American Journal of Public Health en el que, tras analizar la actividad física de 4.000 adultos de entre 18 y 30 años, se observó que practicar ejercicio cinco veces a la semana (con un consumo de 300 calorías por sesión) disminuía en un 17% el riesgo de padecer hipertensión arterial. Estos dos factores (reducción de riesgo de colesterol e hipertensión) serían aquellos que responderían de forma más clara a la actividad física. Pero el deporte también incide en otros como la diabetes: al potenciar el consumo de glucosa del músculo, se reducen los niveles de azúcar en sangre.

El sedentarismo es un factor clave en la explicación el aumento de la obesidad en el mundo occidental, que ha experimentado un incremento considerable y alcanza ya al 23% de la sociedad española.

En un artículo del año pasado la revista  The Lancet, describía la obesidad como causante del 6% del problema de la diabetes tipo 2 en el mundo y hasta el 10,8% en España.

Basta con caminar un día a la semana durante una hora, “que es algo que puede hacer todo el mundo”. “Estamos hablando de un gasto de unas 300 calorías por paseo”

Lo que no es beneficioso es no hacer nada durante la semana y darse una paliza de tres horas el domingo; si se buscan beneficios para la salud, el ejercicio intensivo puntual no tiene sentido”.

Aumentando una hora semanal el ejercicio en personas mayores de 65 años se logra evitar seis muertes por cada mil. Y con dos horas a la semana de ejercicios para mantener el equilibrio durante seis meses se disminuye hasta la mitad el número de caídas en ancianos. Una cifra que no es en absoluto baladí: uno de cada tres ancianos se cae al menos una vez al año, según datos epidemiológicos publicados por el Ministerio de Sanidad.

Y no solo hay que fomentar el ejercicio entre adultos y ancianos, aún es más importante fomentarlo entre los niños, y más teniendo en cuenta como se comenta en el artículo que los niños españoles (entre 4 y 12 años) dedican dos horas y media al día a ver la televisión, más que los ingleses, franceses y alemanes. Desde los colegios no se potencia suficientemente la educación física, es una asignatura pendiente para los gobiernos si queremos mejorar en el futuro las tasas de obesidad entre los niños y detener su progresión.

Recibe nuevas notificaciones

Contacta ahora