Son muchos los motivos que pueden llevar a una persona a sufrir sobrepeso, como una alimentación inadecuada o un estilo de vida sedentario, aunque también hay muchos otros factores que influyen. Si tu cuerpo ha cambiado y crees que puedes tener sobrepeso u obesidad, el primer paso es averiguar si es así. Para ello, se utiliza normalmente el Índice de Masa Corporal (IMC) como el indicador principal para medir el sobrepeso y la obesidad en personas adultas.
¿Cómo se calcula el Índice de Masa Corporal para saber si tienes sobrepeso?
Para calcular el Índice de Masa Corporal, hay que realizar una sencilla operación matemática que consiste en dividir el peso (kg) entre la altura al cuadrado (en metros). A partir del resultado obtenido, los datos indican si tu peso es saludable:
- Por debajo de 18,5: peso insuficiente.
- Entre 18,5 y 24,9: peso normal.
- Entre 25 y 26,9: sobrepeso grado I.
- Entre 27 y 29,9: sobrepeso grado II.
- Entre 30 y 34,9: obesidad tipo I.
- Entre 35 y 39,9: obesidad tipo II.
- Entre 40 y 49,9: obesidad tipo III o mórbida.
- Más de 50: obesidad tipo IV o extrema.
Cuando se rebasa ese límite del IMC que ya indica que padecemos obesidad, más allá de las evidencias a nivel estético, hay otra serie de síntomas que son característicos, como los problemas de autoestima, la dificultad para realizar movimientos, para agacharse o para llevar a cabo las actividades más cotidianas. También hay problemas para respirar, dolores articulares, cansancio crónico y problemas para dormir. Todo ello sin olvidarnos de que la obesidad puede llevar a padecer numerosas enfermedades graves.
Por eso, en Cirugía Laparoscópica de Adelgazamiento, queremos hacer hincapié en la importancia de buscar soluciones. Además de llevar una vida saludable, hay cirugías de reducción de estómago, como la manga gástrica o el bypass gástrico, que pueden ser de gran ayuda para algunas personas que padecen obesidad, y a las que los métodos convencionales no les funcionan a la hora de perder peso.
