Según un reciente estudio del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas de Barcelona, el sobrepeso y la obesidad afectan de forma directa a la vida sexual. No es algo que pasa en todos los casos, pero sí que se señala una relación directa entre estas patologías y una vida sexual limitada. En concreto, la obesidad puede afectar tanto en hombres como en mujeres, a las ganas de practicar sexo y a la autoestima, entre otras cosas.
Obesidad y disfunción eréctil
Algunas de las patologías derivadas del sobrepeso, como la hipertensión arterial o el colesterol, pueden llegar a causar disfunción sexual en las mujeres y disfunción eréctil masculina. Además, en casos de diabetes, por ejemplo, cuando hay resistencia a la insulina, lograr la erección puede resultar complicado en algunos casos. En las mujeres, esto se traduce en una reducción de la excitación y una mayor dificultad a la hora de llegar al orgasmo.
¿Menos deseo sexual?
Los niveles de testosterona se reducen con el incremento de grasa corporal, y esto lleva a una disminución del deseo sexual.
Por otra parte, los encuentros sexuales también se ven más limitados cuando el ejercicio cardiovascular se ve reducido por el sobrepeso o la obesidad. Es más complicado tener encuentros que sean apasionados y largos, sobre todo en algunas posturas.
¿Se ve afectada la fertilidad?
Las mujeres con obesidad son más propensas a padecer ovarios poliquísticos, lo que dificulta en gran medida el embarazo. Además, los espermatozoides de los hombres con sobrepeso se vuelven más lentos, lo que tampoco ayuda a facilitar la reproducción.
Todas estas alteraciones que puede causar la obesidad en la vida sexual de hombres y mujeres, pueden tener solución en la mayoría de los casos. Para ello, como siempre recomendamos en Cirugía Laparoscópica de Adelgazamiento, lo mejor es acudir a un profesional que pueda estudiar el caso concreto y ofrecer una solución en base a sus necesidades. También hay que tener en cuenta, que el sedentarismo y la alimentación son factores clave que pueden llevar a sufrir sobrepeso u obesidad, entre otros, por lo que revisar los hábitos de vida es fundamental para mejorar.
