En post anteriores de nuestro blog sobre cirugía de adelgazamiento hemos comentado que la obesidad es una de las enfermedades con mayor incidencia entre la población. Según datos de la OMS, más de 700 millones de personas en el mundo la padecen.
No hablamos únicamente de un problema estético, sino de algo asociado a múltiples enfermedades, las llamadas “comorbilidades”. Un exceso de peso debido al acúmulo de grasa genera importantes cambios inflamatorios y metabólicos.
Comorbilidades de la obesidad
La obesidad, y en mayor medida la obesidad mórbida, conlleva una serie de enfermedades asociadas que inciden directamente en la calidad de vida y pueden incluso reducir la esperanza de vida. Las principales comorbilidades de la obesidad son:
- Hipertensión arterial
- Diabetes mellitus tipo 2
- Apnea obstructiva del sueño
- Dislipemia
- Problemas articulares
- Reflujo gastroesofágico
También se puede asociar a enfermedades ginecológicas como el síndrome del ovario poliquístico o digestivas como la esteatosis hepática (hígado graso).
El IMC para detectar la obesidad
La obesidad, además de ser multifactorial, puede manifestarse de muchas formas. Para detectarla, nos remitimos al índice de masa corporal (IMC). Es el valor numérico que toma el peso y la altura para saber si el primero es saludable. Se calcula dividiendo el peso de kilogramos por la estatura en metros elevada al cuadrado (IMC = Kg/m2).
Los valores del IMC son los siguientes:
<18: peso muy bajo
20-18: peso bajo
20-25: Valor normal
25-30: Sobrepeso
30-35: Obesidad grado I
35-40: Obesidad grado II
45-50: Obesidad grado III
>50: Súper-obesidad
En Cirugía Laparoscópica de Adelgazamiento te recordamos que en el IMC puede influir la edad, la raza, la complexión, el sexo y el tipo de actividad que lleve a cabo cada persona.
Tratamientos contra la obesidad mórbida
El objetivo principal es disminuir el peso reduciendo la cantidad de grasa en el organismo. Esto lleva aparejado una mejora en las comorbilidades asociadas. Sea cual sea el grado de obesidad, se debe abordar de modo pluridisciplinar. Con especialistas en Endocrinología, Nutrición, Cirugía y Psiquiatría. Y, como no, cirugía bariátrica.
Cuando el tratamiento dietético y la actividad física no sean efectivos habrá que buscar otras alternativas como una intervención quirúrgica. La cirugía bariátrica engloba técnicas que provocan una pérdida de peso importante pero controlada. Lo hace alterando tanto la capacidad de ingesta como la absorción de nutrientes. En la mayoría de los casos este tipo de intervenciones reducen el tamaño del estómago.
